LABERINTO DE OLVIDADOS por Javier Vazquez Zaragoza

La Azucarera Aragón se situaba en Zaragoza en la margen izquierda del Ebro formando parte de un tejido industrial que se iba desarrollando en esa zona en el siglo XIX y que llegaría a contar con tres instalaciones de este tipo, lo cual nos pone de manifiesto el auge que tendría en Aragón el cultivo de la remolacha y su posterior procesado para la obtención del azúcar. No debemos olvidar que la pérdida de Cuba en 1898 (primer productor mundial por aquel entonces) supuso la necesidad de buscar cultivos alternativos a la caña de azúcar para la obtención de tan preciado producto.   En 1894 ya se obtuvo la primera campaña y hasta el cierre de la fábrica en 1966 la instalación fue un punto vital del desarrollo de la zona en la que se ubicaba, perfectamente comunicada por vía férrea y contando con infraestructuras complementarias como talleres, almacenes y viviendas para el personal siendo un auténtico complejo autosuficiente. Desde el punto de vista arquitectónico la Azucare

Enclavada en la localidad turolense de Aliaga, esta central termoélectrica tuvo una vida relativamente corta. La que fué en su momento la central eléctrica más grande de España comenzó su andadura en 1952 y se nutrió del carbón de la localidad, además de un embalse junto a las instalaciones que servia como complemento. La empresa propietaria fue Eléctricas Reunidas de Zaragoza que la mantuvo hasta su cierre definitivo en 1982. El carbón local ya se habia agotado y resultaba poco rentable el abastecimiento de carbón de otras localidades turolenses ya que debia hacerse con camión. Recorrer sus instalciones, ya olvidadas y en donde la ruina campa a sus anchas, sobrecoge por la grandeza de espacios. La central se articula mediante dos bloques paralelos de líneas sencillas pero de una imponencia, casi catedralícia que verdaderamente impresiona.